Érase una vez en el sin tiempo del tiempo, en una rocosa arbolada y muy alta montaña, tanto que casi se podía acariciar las estrellas con las manos, vivía una abuela. Nadie conocía su nombre, o mejor dicho, todos la conocían como, La dama de Blanco, así era como la habían bautizado. Cuentan los pastores del lugar, que era una abuela sin edad, que se vestía toda de blanco; sus cabellos eran muy muy blancos y hasta sus pensamientos eran blancos.
Casi no se dejaba ver, cuando ella sentada en su hamaca, que colgaba del pino más alto, porque según decía, podía estar cerca del cielo y de la tierra al mismo tiempo; así era como desde lejos divisaba y veía cuando alguien llegaba. Entonces pronta salía a su encuentro; alegremente se llenaba de estrellitas que tomaba del cielo y toda luminosa, bajaba por el caminito bordeado de azareros blancos; según contaba, Dios le había pedido hacerlo, al decirle un día, en intima confesión: debes convertir este lugar en un reino blanco y puro, adonde llegaran muchos de mis hijos, que son tus hermanos y les mostraras que “Yo” existo en todo y en todos, y que en comunión con El Padre a todo se puede llegar.
Así la abuela o Dama de Blanco, fue haciendo de cada espina, cada piedra, cada terrón de tierra, la manifestación del Amor de Dios.
Los que llegaban se quedaban muy impresionados con la casa, que por supuesto era toda blanca, muy blanca, por dentro y por fuera. La rodeaban doce columnas cubiertas con enredaderas de jazmines blancos con formas de estrellitas de cinco puntas, que hacían que uno en el lugar se sintiera navegar en aromas celestiales, a lo que ella explicaba, así podían descender los Ángeles que Dios enviaba como mensajeros, especialmente cuando la visitaban niños, porque según ella al decir de Dios, esos son los puros; también los hay en otras edades, porque afirmaba, que uno no tiene edad, que “se es joven como el tiempo y tan viejo como la Eternidad”; así llegaban hasta ancianos, que no es lo mismo que decir viejos; aquellos son los que no dejan morir nunca su niño interior. Ese que vive en el corazón y que si lo alimentamos permanentemente, con su “Voz” silenciosa nos habla de la Verdad. Adentro la casa también era toda blanca, apenas unos pocos muebles hechos con juncos solo para guardar lo indispensable, y que todo estuviese en orden; porque a decir, el orden en manifestación Divina, en armonía, simplicidad y belleza. Para sentarse, unos mullidos almohadones blancos, rellenos con las plumas que los gansos perdían por algún hecho natural, ya que en la casa de la abuela, la “Vida” era solo una, afirmando siempre que como la “Vida es Amor”, ahí el sacrificio no existía.
Así la naturaleza se encargaba equilibradamente a través de las manos de Dios de hacer llegar todo lo necesario a su debido tiempo, que la abuela decía, no es lo mismo que en el tiempo por uno querido. Así como cuando la primavera asomaba y el Padre Sol emitía mas poder con sus rayos y el calor se hacia sentir, benditas gotas de lluvia rebalsaban la acequia, que de vertiente natural se deslizaba de la montaña, bordeando la casa, haciendo que la represa de blancas piedras se llenara con las curativas aguas virginales, en ella la abuela con Sami, su fiel perra pastora, muy lanuda y por supuesto toda blanca, que le había sido regalada por un juvenil muchacho, un delicioso ser, de nombre Darío, que de muy lejos había llegado a visitarla y sintió que era tiempo ya, que la abuela fuese acompañada por alguien mas que sus mundos naturales y celestiales. Al despedirse se la dejo diciéndole, es lo menos que puedo hacer, después de haber aprendido que el Amor esta en “Ser y dejar Ser”, agregando, estamos tan acostumbrados a los “quereres” que sin darnos cuenta hacemos culto del egoísmo, sin disfrutar y vivir en la alegría del amarnos siendo felices dando nos, dando, como tantas veces vos me lo repetiste, en el hoy y en tantas vidas, lo que es el “Amor”, ya que eran almas compañeras de vidas y vidas, hoy aquí reconociéndose en infinito Amor desapegado. Sami esto también lo tenia incorporado ya que al llegar mas que una amorosa perra, parecía una cabrita lugareña, ya que saltando de piedra en piedra desbordada de alegría, reconociendo en Dama de Blanco a una amiga atemporal, no sufriendo por la ida de su antiguo amo, sino disfrutando del momento presente, como si la abuela en otro tiempo se lo hubiera dicho: el pasado se fue, el futuro se desconoce, solo el hoy existe, y en el renacer en lo supremo de cada instante. Ellas dos, mas los pájaros del lugar y algunas guías de flores que caían al agua, todos así hermanados se daban refrescantes baños armonizadores, ya que según decía Dama de Blanco, el agua es la Savia de la Vida, es Dios corriendo por nuestras venas, por eso debemos mantenernos limpitos por dentro y por fuera, alimentos sanos, pensamientos puros, acciones amorosas y así Dios en forma de lluvia se presentaba en esa enorme fuente natural, equilibrando todas las energías.
Lo mismo ocurría cuando un viento fuerte limpiaba el aire, así los humanos podemos respirar las gotas del Amor que Dios nos manda en él, llenando nuestros pulmones de energía vital, de “Vida”. Ese mismo viento tiraba el árbol que tenia mas años de vida física, y ya con su manifestación corpórea cumplida, se lo aprovechaba, amorosamente se lo reverenciaba en gratitud por todo lo que se había donado en sombra, frutos, oxigeno, sosiego y lo seguiría haciendo, ya que convertido en leña, pasaba a dar su Amor alimentando la salamandra con que la abuela y todos sus hijos de Dios avenidos se templarían en el invierno, incluida Sami, que inteligentemente ayudaba y compartía todos los momentos, como que en esta vida estaba haciendo su ultima vivencia como animal, al menos lo parecía por su sabiduría, como decía la abuela, que sin cansancio le repetía: “Sami, cuando seas humana vivirás muy alerta, para no perder tu sabia nobleza”. La casa casi no tenía paredes, amplios ventanales acupaban todo el lugar, tampoco tenia cortinas, porque Dama de Blanco decía que en la tierra no había telas que pudieran compararse a las naturales, perfectas y maravillosas expresiones de Dios. Así la casa era habitada y compartida por todas ellas, el Padre Sol, la hermana Luna, las hermanas estrellas, los hermanos luceros, los hermanos violinistas unos, cantores otros, como la abuela llamaba a los grillos, pájaros, chicharras, luciérnagas o linternitas naturales, ojitos fosforescentes de Dios que volaban y volaban, y cuando ya cansadas se posaban en los cedros azules, estos parecían pinos de Navidad.
Aunque todo relucía como blanca espuma, tenían permiso de entrar las hermanas lagartijas que siendo muy limpias y simpáticas ayudaban a que no hubiesen insectos ponzoñosos, cumpliendo así su tarea dentro del Plan Divino, alimentándose.
Cuentan que las Noches Buenas gustaba pasarla sola, aunque ella decía que nunca lo estaba, porque el que sabe que Dios vive en el, jamás lo esta. Así ella se vestía como siempre, de fiesta siempre decía que viviendo con Dios se esta continuamente de fiesta y estando así los pensamientos bajos no entran y entonces el temor no existe, además recalcaba que no se necesita cambiar de vestido porque la fiesta esta en el alma,… por tal cualquier vestido luce luminoso. Contaba que Dios se la había hecho saber al decirle una vez, “Cuando brillo adentro me reflejo afuera”. Se preparaba su comida que consistía en un gran plato de arroz puro (o sea integral), así le llamaba, afirmando “Es como Dios lo trae al mundo”, entonces no enferma, porque lo puro esta lleno de Energía Divina, por tal es todo Amor, y el Amor no solo no enferma sino que cura todas las enfermedades. Se sentaba en su hamaca con su arroz, aderezo con unas gotas de aceite de oliva, que extraía de los olivos, que por Gracia Divina, habían nacido en el lugar, unas hierbas picaditas, que fresquitas había cortado de la huerta y unas nueces de los nogales que en abundancia Suprema estallaban en mayoría, además le agregaba un poquito queso previamente rallado, que algún pastor había fabricado con la leche de sus cabras y que pasando por ahí se lo había regalado, y en ese manjar de Noche Buena, se regocijaba haciendo honor a su dicho, “En lo simple está la verdad y Belleza de la vida”.
Elegía arroz porque eran muchos granitos, asemejados a tantas almas solitarias y tristes estuviesen esa noche. En ese hacer, preparaba “su viaje”. Como era su costumbre llamaba a sus hermanas estrellas que ya sabidas, le hacían un caminito de luces hasta el lucero más brillante, que la esperaba. Ya en él, con la ayuda de un ángel trompetista convocaba a los pájaros mas coloridos y veloces que ese día le visitaran y así navegando cielos, llegaba a todas las almas, las abrazaba con mucha, mucha alegría, y sintiéndose hermanados todos, pasaban una Nochebuena Real, una Nochebuena de Amor con Dios en el corazón.
Hubo una Nochebuena, al regreso de su viaje estelar, le fue avisando que en pocos días llegaría a visitarla una de sus nietecitas que mucho hacia que no veía, ya que vivía en una muy lejana ciudad, a la cual, Dama de Blanco nunca regreso desde que había subido a su Sagrada Montaña, a donde un día Dios la había llevado a vivir, para así en el silencio poder contarle mas secretos. Era por eso que sabia cosas que otros no sabían, pero que todos podemos saber, según decía, pero no buscando por afuera, sino dentro nuestro, porque Dios vive ahí, y nadie nos puede dar lo que ya tenemos, que es único en cada uno; que vibra con nosotros, que vive en nosotros, que es nuestro Padre, Hermano, Amigo y hasta Amado Amante, como muchos Santos lo reconocieron. Y que por estar tan cerquita, más fácil podemos sentir y escuchar, si nos prestamos atención. El saber que Naná, tal era el nombre de su nietita, vendría, le agrego una chispita más de alegría, a la mucha que la abuela ya tenia, ya que a su decir, yendo de la mano de Dios, sólo se conoce de alegrías. Naná, cuando era chiquitita le había secreteado que le gustaba hablar con los angelitos, que algunas veces los veía en su casa jugando como luces de colores, por eso la abuela estaba feliz, pensando en el momento que Nanà conocería “Cletonia”, que así se llamaba ese pedacito de montaña encantada a donde Dios la había traído, diciéndole que se parecía, o mejor dicho que trabajando juntos, unificados, “El” con el Poder y ella con la Fè lograrían que el lugar fuera testigo fiel de esos planetas Sagrados que existen, pero que el hombre no descubrió aun, donde los hombres viven unidos en la única ley verdadera, la que Dios enseño, enseña y enseñara, a cada instante y a través de toda y cada manifestación: “La hermandad Fraternal Cósmica Universal del Amor”. Por eso la abuela estaba ahí, hermanada con todos los reinos, mineral, vegetal, animal, humano, planetario, cósmico y Divino, haciendo de Cletonia un planetita Sagrado de Amor; una manifestación terrenal del Gran Cletonia Estelar, y sabia que eso a Dios le iba a encantar. Una mañana al despertarse y como era de costumbre, casi un ritual, después de saludar al Padre Sol, que según decía hay que reverenciar, por ser el Dios Vivo que nos alimenta con su calor la Vida, acariciar con su mirada las altas y molinerías cumbres montañosas, agradecer a todos sus hermanos, a los que veía, unos, sentía otros,… sentarse a su hamaca y saborear su matecito con hierbas, endulzado con miel que tan amorosamente las hermanitas abejas, habían libado de todas las flores del lugar con tanto trabajo, esmero y alegría, comenzó a amasar el fresquito pan casero que diariamente preparaba, por si Dios le mandaba a algunos de “sus hijos”, ya que “El” le había dicho, debes convidarlos con pan hecho por ti, en ofrenda a “Mi”, porque “Yo soy” el Pan de la Vida, además servirás un tecito de menta fresca, que cultivaras, que será el agüita dulce de “Mi” Amor, el mismo que “Yo” cultivo a cada instante en cada uno de mis hijos.
Amasando estaba en esa comunión con su corazón, porque ya le era bien sabido que esa es la casita donde mora Dios en los humanos, como un día “El” le había regalado en saber, y ella aplicándolo en todos sus haceres, supo que eso era la Real meditación, en cualquier tiempo, lugar o acción. Cuando otro día “El” le confió: “Si siempre estas unida a “Mi”, nada necesitaras, todo lo tendrás y todo lo sabrás, y la abuela era re-fiel, los secretos que Dios le contaba los cumplía siempre, sin nada preguntar, sin nada esperar. ..Era Dios, a que dudar!! Decía y seguía amasando despreocupadamente, porque la “Voz” le había enseñado que la “Verdad”, esta solo en ocuparse de lo Real. Y ella estando con Dios, muy suavecito escucho la “Voz”, que recordándole le susurro, Nana cumplirá diez añitos en Cletonia, que ella en su euforia había olvidado. Termino de amasar, puso el pan en el horno de barro, que ya con el calor a punto caramelo lo esperaba, y sentada en su hamaca, exhalando, dijo “Gracias Dios, jamás te olvidas de detalle alguno” luego le pregunto, “que le regalare?, como no tenia dinero, ya que al irse a la sagrada montaña, Dios le había dicho, te voy a regalar la llave Mayor, la que abre el Portal del Reino de los Cielos, tuya es la elección. Si la aceptas debes ponerme a “Mi” primero antes que todo en el mundo, y hoy te pido que me sigas donde te dedicare, ahí vivirás en la Fe. “Yo Soy Tu Padre”, sé todo lo que necesitas, y si confías y me obedeces, nada te faltara; solo escucharas “Mi voz”, ella te guiara, agregando, “Yo” necesito de todos mis hijos para realizar “Mi Gran Obra de Amor Universal”, pero son muy pocos los que me escuchan; algunos lo hacen, pero se quedan demorados en preocupaciones vanas, perdidos en la ilusión de la vida y no son felices o son mucho menos de lo que podrían serlo si tuviesen Fè. Así que la abuela, que sin saberlo, era muy sabia, sabia que la Verdad y todo el trabajo estaba en escuchar la “Voz de Dios”, que había empezado contándole secretos desde su corazón … y más ella obedecía, y más se entregaba, secretos más profundos le develaban.
Así amorosamente le guiaba en todos sus haceres, llenándole de inspiración. Estando siempre alerta a toda manifestación de Dios, como entre otros, sus hermanos celestiales, invisibles pero sentidos, Ángeles y muchos Sabios Maestros que se dejan ver a medida que nos volvemos limpitos en cuerpo y alma, o como dice Dios, puros de corazón, aprendiendo que no solo de pan vive el hombre, según contaba.
Como ella hacia todo lo pedido por su Padre, Hermano, Dios, tenia la certeza que esto del regalo “Él” se lo iba a resolver. Así de simple era todo su Vivir, su gran Fé, y en ella descansaba. ..Acaso no la había consolado Dios, una nevada noche de calor de los leños, cuando en comunión con su corazón, ella le preguntaba: Padre Amado, es esta la Verdad? Es esto el Amor? He dejado a mis hijos, familia, amigos, trabajo, el mismo que “Tu” un día me llevaste a tomar y todo eso que nos enseñan que es la vida, todo por escucharte, por seguirte y volvía a repetirle; es esto el Amor? Así estaba cuando sintió una brisa suave, un tiernísimo halo rosado la envolvió, y su amado Padre, en acariciante tono así le hablo: “nada has dejado, porque todo a “Mi” me pertenece, a tí solo te correspondió por un espacio de tiempo, justo el que precisabas. “Yo” los junté en almas y en diferentes trabajos para que crecieran, tú creciste tanto que llegaste a oírme, y “Me” seguiste hasta aquí, que es donde hoy te necesito. Acaso no te dije un día ponme a “Mi” primero en todo y todo te será dado, y hoy, estoy de a poco mostrándote este nuevo caminar, “si lo hiciera de golpe tropezarías, además te enceguecerías porque te di la Llave Mayor, y al abrir la puerta sin estar preparada, no verías lo que en “Mi Reino” hay, Brillante Luz Celestial. “Pasaste un tiempo de silencio, lo necesitábamos los dos: “Yo” para enseñarte cosas muy profundas, tu para reconocerlas, asimilarlas y ponerlas en práctica y hoy en este nuevo orden, los hoy tus hijos, nietos, amigos carnales, van regresando, te aportan alegría de este mundito de a ratos, luego regresan a sus tiempos, y “Yo” como soy Dueño, Hacedor y Señor de Todo y de Todos, te premio con este trabajo, impulsando a todos mis hijos. Los que escuchan y quieren “Verme”, llegan a Cletonia, y tú los recibes, obedeciendo mi pedido. Tú confiaste, te entregaste, tuviste Fé, eso es el Amor, el verdadero y único Amor. Por eso en ti di a saber: “Descansa en Mi, “Yo” y tu somos uno”. Y como aprendiendo estaba, la abuela descansaba.
Era el atardecer de ese final de Enero, cuando regando las azuladas lavandas, que por el ardiente sol sedientas se encontraban, pero que sin nada esperar cumplían su misión, embriagando el aire con su exquisito perfume Divino, disfrutando ella del rico aroma, repasando los tantos secretos que Dios le había confiado, como este que la fascinaba, por el perfume ella descubría el color de las flores sin verlas; así Dios sutilmente la había llevado a reconocer los diferentes matices de la Energía Divina manifestada en cada ser o cosa.
En eso algo le palpitó. Apenas faltaban ocho días para la llegada de Naná y aun sin regalo, se dijo. Un picaflor azulado verdoso, se acerco sediento a las lavandas, era el mismo que todas las mañanas picoteaba el ventanal del dormitorio de la abuela, y ella tanto le amaba que abstraída mirándolo, casi desvanecida en ese éxtasis,..La “Voz” la sobresalto: “oye entra a la casa y busca algo brillante que he mandado dejar, al encontrarlo sabrás de lo que se trata”. Buscó y buscó. La casa sin ser grande tenía altos y bajos, era tan simple y tan liviana de trastos, que solo había que caminarla y saber mirar. A su decir, lo Real es simple, está a la vista y al alcance de todos, pero no todos saben y quieren ver.
Además, lo de casi vacía, tenia una explicación, y siempre la repetía, “en la mochila solo lo indispensable, porque livianito se puede ir a todo lugar”.
De regreso por la sala y sin aún haber encontrado nada, pero su Fé y alegría tan igualita como al principio de su búsqueda …..oh! .. Ahí estaba! … como brillaba! Era oro puro, era hermosa, era una lámpara y su genio; … y Dama de Blanco, que nunca perdía el asombro, este fue de tamaño mayor que más blanco resplandeció, y sin perder la oportunidad, destiló, “el asombro no debemos perderlo jamás, porque si no nada nos quedará", y agregó, "Dios en todo está, todo lo sabe, todo lo puede y todo lo da", mientras dos lagrimas se le deslizaban, chipoteándole por sus rosadas mejillas, mezclándosele todos los sentimientos dijo al recobrar la serenidad: Dios, te volviste genio?? Si!!.. Contesto “Él”, y te tengo que regalar??? .. Pregunto la abuela .. Si!!! Replico Dios, pero sin olvidar nunca jamás que “Yo” estoy y en todos al mismo tiempo y lugar, y tampoco debes olvidar nunca jamás, que para ser feliz y “Yo” pueda morar en ti, solo debes dar, dar y dar, sin nada esperar”. Y como a Dama de Blanco eso la hacia re – feliz, le pregunto a Dios: “puedo contarle a Nana como hice para hablar con vos??.. Dama de Blanco le pedía a Dios permiso en todos sus haceres, porque bien aprendido lo tenía: “Que todo le pertenece a Dios”.
Cuando cumplió diez años, a la abuela (Dama de Blanco), le regalaron una lámpara igualita a la que le regalaría a Nana, y .. Todos los días se hacía un ratito, antes de irse a dormir, para frotarla y frotarla, para que no perdiera su brillo. Le brillaría más.
Pasó el tiempo y así fue. Tanto, tanto brillo, que una noche mientras en sueños estaba, fue despertada por unos rayos de luz dorados tan intensos que sus ojos quedaron abiertos de asombro al ver como se convertían en un Genio. A ella se le chispotearon dos lagrimas por sus rosadas mejillas y le preguntó: "¿Quién eres?.." “Soy Yo”, el ángel que vive contigo, que te cuida y acompaña desde siempre, desde que en Chispita Divina te desprendiste de “Mi”, y hoy vengo a decirte: “que así como con tanta inocencia me cuidaste y amaste, si así sigues creciendo, con la misma inocencia en todo lo que hagas, “Yo” creceré dentro tuyo y cuando ya estés preparada y hayas pasado por todas las pruebas a que te someterá la Vida, conservando la pureza de hoy, “Me Revelaré” y te diré, crecimos juntos, “Yo Soy en ti y tú en Mí”, para no separarnos ya nunca jamás, y así, conocerás la Verdad, y así, solo así, sabrás lo que es Vivir en la alegría de la Gran Paz".
Así la abuela de Nana, Dama de Blanco para los demás, hizo un rollito, lo coloco dentro de la lámpara, preparo un hermoso paquete con papel plateado, que un ángel le acercó, y donde todas las hermanas estrellitas del cielo se posaron dibujadas y un brillante lucero, el “Mayor”, disfrazado de “Genio” apareció, la abuela más asombrada le preguntó,.... Quien eres? Y él con un guiñio, y sonriéndole dijle .. Shhh… Shh.. “Yo Soy Dios”. Y mientras la abuela cerraba el paquete haciéndole un gran moño, por tercera vez dos lágrimas se le chipotearon por sus rosadas mejillas, pero esta vez las uso, para dibujar: "Gracias Dios, tu infinita bondad, siempre, siempre presente está!"
Al partir de Cletonia y despedirme de Dama de Blanco le pedí: "¿no me regalarías el más fácil y sabio secretito que te haya dado Dios?"
Ella mirándome solo dijo: “Dios es tan simple como todos sus secretos, solo que al descubrirlos deben ser practicados, como este: Haz todo lo que realizas como si Dios te mirase, porque El nunca deja de hacerlo”.
Fuente y Contacto: www.eldivinohacedor.com.ar
-
María Isabel Fariña
12-11-2019 11:51hs - país: Argentina
Aún no viaje allí. Y estoy ansiosa.
Esperoo poder ir en diciembre de este año 2019. Así será -
Viviana Falcone
22-09-2019 09:36hs - país: Argentina
Holaa..desearía recibir más información..más q nada de ese lugar...cletonia y la Sra Marta..un lugar maravilloso donde desearía ir en marzo o abril... gracias y saludos!!!! -
Veronica Guirguet
03-03-2019 11:26hs - país: Argentina
Hola!!! Quisiera viajar a Cletonia. Me recomendaron el lugar hace unos años y no se llegar. Pueden darme información? Muchas gracias! -
Miguel Angel
08-03-2017 18:23hs - país: Argentina
Hola. Nos conocimos en los giros sufies en el espacio depurativo. En abril vuelvo a las rosas. Estoy en nqn. Necesito comunicarme previamente para consultar algo.
3512953619
Gracias - Miguel Angel
08-03-2017 18:21hs - país: Argentina
Hola. En abril vuelvo a las rosas. Estoy en nqn. Necesito comunicarme previamente para consultar algo.
3512953619 -
Stella Maris
24-02-2017 16:11hs - país: Argentina
Tanto me habían hablado, y llego el momento, estoy saliendo de Cletonia .y no camino flotoooooo, estoy sentada junto a le vertiente de purísima agua q me recibió y me despide, y me. La divina magia dentro, la afirmación de Dios en mi y en tdo, el amor vivificado en cada instante, Marta q en silencio te guía y acompaña en vivo amor!!!!
Gratitud infinita!!!!si dios lo quiere volveré y si lo sienten no lo duden , conocerán el EDÉN!!!! -
Sabrina silva
23-02-2017 21:41hs - país: Argentina
Hoooola quusiera saber.como llegar. Me nombraron el sitio y solo senti indagar ..... Algo en mi resono.
Pueden ayudarme a dar con Martha o indicarme cm se llega. Abrazos de luz
Sabri -
Viviana
04-02-2017 22:35hs - país: Argentina
Hola. Supe de Cletonia y pocos datos de este lugar pero los suficientes para sentir que tenía que ir. Y fui. Una experiencia inevitable. Un lugar soñado. Dios y su creación vibrando con uno al unísono. Noche, estrellas, silencio y todos los indescifrables ruidos de la naturaleza a pleno. Día, sol y belleza, más belleza del amor manifestado en toda cosa creada. Pasar por Cletonia es vivir a Dios en nosotros. Ah, y leer un libro recomendado por Marta. Tenés que ir. Dios te espera. - Vivi Ama
18-01-2017 19:03hs - país: Argentina
Hola mañana parto hacia allá. No veo la hora de compartir días con Uds a quienes no conozco pero me han hablado mucho, muchos y muy bien. Dios los bendiga. -
Bettina
26-06-2016 14:56hs - país: Argentina
Hola quisiera saber como es para ir, si se realiza reserva o no, y que cosas hay que llevar y demás. Gracias -
patricia eguivar
13-06-2016 10:01hs - país: Argentina
hola, me encantaría formar parte de ese rincón de luz por un tiempo. me podrían informar cómo llegar con auto?. muchas gracias! -
María Cristina, Dalla Riva
11-03-2016 18:10hs - país: Argentina
Estoy muy disconforme con mi vida, aun teniendo la certeza de que Dios Vive En mi..., me cuesta discernir,y creo tener baja autoestima. Deseo armonizar mi ser, conocerme, despegarme del mundo y vivir PAZ.....Por ello me agradaría experimentar Cletonia...Deseo saber como llegar... no tengo vehiculo. Muchas gracias... -
PAULA NADIA
24-02-2016 20:05hs - país: Argentina
Hola Marta! Quisiera ir a Cletonia!!! Deseo info de como llegar y cuanto sale. Desde ya muchas gracias! Un abrazo! Paula. -
gabriela
22-11-2015 21:13hs - país: Argentina
Hola, mi nombre es Gabriela y necesitaría me puedan guiar para llegar hasta allí.Muchas gracias. -
Federico soldi
17-08-2015 11:06hs - país: Argentina
Es mi tercera estadia en este mágico y sagrado
lugar, siempre recibiendo, vivencias intransferibles
Comunión total con y el Amor.
Gratitud infinita a ese DIOS que es presencia viva
en cada instante , cosa y. lugar!!!!!
Gracias Marta por estar y SER!!!!
Hasta la proxima!
Sebastián AlberoniMeditación, Retiros Espirituales, Meditación de la Conciencia Pura, Ho'Oponopono, Camino Espiritual Integrado, Meditación So Ham, Sesiones Individuales... ver más
