por Celia Fenn
Traducción: Paloma Fernández Fernández. artesyoficios@arnet.com.ar
8 de enero: La Tierra está recalibrando sus energías tras la infusión masiva de luz que barrió la Conciencia Colectiva en diciembre. Este proceso de ajuste está siendo experimentado a nivel individual y planetario.
Individualmente, parece que los cuerpos sutiles están realineándose a nivel del CHAKRA del CORAZÓN, a fin de posibilitar los poderosos flujos de energía de la Llama Gemela que están entrando. Podría decirse que se trata de una “expansión” del chakra del corazón. Muchas personas ya están advirtiendo el regreso de viejos amigos y amantes que parecen estar más abiertos y afectuosos, lo que permite que haya reconciliaciones y que se formen conexiones más amorosas. Es como si el corazón se hubiese expandido dejando lugar para esas relaciones que antes no cabían. La energía del AMOR está fluyendo cada vez con más fuerza y, además, hay una intensa sensación de que la PAZ es posible ahora mismo, una profunda paz interior que antes no existía.
Pero, a medida que vamos realizando ajustes a nivel colectivo, a nivel individual estamos sintiendo síntomas de perturbación electromagnética en nuestros campos energéticos. Entre éstos se cuentan vértigo, náuseas, diarrea, somnolencia, agotamiento y dolores articulares. Además, a medida que el corazón se ajusta, es posible que se sientan palpitaciones cardiacas. Algunas personas informan de fuertes síntomas emocionales de ansiedad, soledad y depresión, así como de que tienen la sensación de estar completamente “perdidos” o “atascados”. Mi consejo es que no se lo tomen como algo personal, se trata de la percepción individual de un ajuste colectivo.
Los humanos están aprendiendo a funcionar colectivamente y los Trabajadores de la Luz que hayan hecho el esfuerzo de seguir prestando su servicio a la 9ª dimensión de la Tierra por supuesto que van a sentir estos cambios y ajustes en la conciencia colectiva de la Tierra. Estos Trabajadores de la Luz son más sensibles a dichos cambios porque en eso consiste su trabajo, en fluir con los cambios de luz y energía para ayudar al colectivo a ajustarse y a estabilizarse. Sólo puedo recomendarles que, si sienten estas sacudidas, intenten descansar y permanecer arraigados. En este tiempo, no fuercen su cuerpo ni se fuercen a ustedes mismos. Si permanecen centrados, amorosas y pacíficos, todo volverá a reequilibrarse.
La propia Tierra está sintiendo este recalibrado; todos podemos apreciar los ajustes y cambios climáticos. En muchos sitios del hemisferio Norte ha hecho un calor inusual, apareciendo flores y brotes primaverales en diciembre y enero. En los EE. UU., mientras que se han producido intensas tormentas en las llanuras, en la parte Este del continente no ha nevado nada. Aquí en el hemisferio austral también estamos experimentando las fluctuaciones climáticas. Pese a que estamos en pleno verano y aquí donde vivo suele hacer un tiempo extremadamente caluroso y seco, todo sigue verde todavía y hace unos diez días estuvimos varios con un frente frío y lluvia. Hoy también hacía más bien fresco y a eso de las 8 tenía tanto frío que estaba encogida en la cama pese a que tenía mi pijama de invierno y una manta abrigada.
No hay duda de que la Tierra está cambiando ni de que nosotros estamos cambiando. De manera gradual y tan suave como es posible, día a día, sin traumas ni cataclismos demasiado importantes. Lo que me parece inquietante es que ahora mismo haya tantas personas que están volviendo a situarse en una posición de nerviosismo y miedo a la “Inversión de los Polos” y a la “catástrofe”. Me parece triste. Estamos entrando en una nueva fase de desarrollo y yo quiero que, de una vez por todas, dejen de llevarme a esa posición de “marcha”, que parece ser el mismo lugar en el que estábamos en el año 2000. Todo ha cambiado demasiado, han pasado demasiadas cosas; por favor, no se dejen volver a atrapar por esa posición de “calamidad”; en caso contrario se perdería todo el trabajo de ascensión de los últimos seis años y los humanos seguirán “estancados” con su evolución frenada. El test del cambio de coloración espiritual revelará si el temor y la ansiedad prevalecen sobre el Amor y nuestra evolución futura. Es hora de que demos un gran paso hacia delante... ¡no hacia atrás!
Por último, una de las “causas” de las perturbaciones electromagnéticas que estamos sintiendo, aparte de las ondas solares, puede ser la presencia del cometa McNaught que transita ahora las inmediaciones de la Tierra bastante cerca del Sol. Esta imagen muestra lo cerca que está el cometa, visible a simple vista desde algunos lugares. Esta imagen es de www.spaceweather.com.
9 de enero: Gracias a todos ustedes por responder tan positivamente a la entrada de ayer de la “Bitácora de la Tierra”. Mi agradecimiento especial a Jeanine DuBois, de www.compassions-doorway.com. Jeaninine, terapeuta en biocampos, ha notado que los síntomas asociados al cambio son muy similares a los de la falta de ácido fólico: “Si estamos evolucionando y nuestro ADN está cambiando, ¡tiene sentido que ahora, al igual que una madre embarazada, necesitemos más ácido fólico! Yo misma he obtenido resultados bastante bajos de ácido fólico que le pedí a mi kinesiólogo que examinase (se lo pedí porque se me siguen astillando las uñas y se me sigue cayendo demasiado el pelo, pero ahora veo una conexión mucho más importante). Los invito a que compartan esto con otras personas que pudieran estar atravesando por experiencias similares (síntomas), por si quieren comprobar si ellos también necesitan cantidades de ácido fólico superiores a las normales”.
Si desean aprender más acerca de esto, visiten el sitio de Jeanine en www.compassions-doorway.com.
Esta mañana estuve ojeando cosas por la red y me dejó “aturdida” lo “sensibilizados” que parecemos estar a nivel colectivo cuando aparecen escenarios catastróficos. Muchas de las recientes teorías de desastres citan a la “ciencia” o la teoría de los “ciclos” como prueba de que estamos entrando en un ciclo catastrófico y deberíamos prepararnos para lo peor.
Bien, mi respuesta sería que la mayor parte de la “ciencia” trabaja a nivel de física newtoniana, la cual considera a la Tierra y el Cosmos como una máquina enorme e impersonal que cuyos diversos componentes mantienen una conexión muy escasa entre sí. Este es el punto de vista que sostiene mi vecino, un hombre culto con una maestría en ingeniería eléctrica cuyo padre era profesor universitario. Estuve hablando con él acerca de los datos científicos de la NASA sobre las llamaradas solares de diciembre, y su respuesta fue que no afectarían a la Tierra en absoluto. Recuerdo que pensé: ¿cómo podrían no afectarnos? Pero después lo estuve elaborando con el enfoque cuántico posteinsteiniano, según el cual todo está interconectado y cualquier cosa afecta a todas las demás. Considero que la Tierra es un ser vivo y consciente que forma parte de nosotros como nosotros de ella, que nos cuida y que no quiere perjudicarnos. Tenemos el contrato con la Tierra de estar aquí, mientras que su contrato con nosotros es mantenernos y ayudarnos. Es cierto, podríamos estar incumpliendo nuestra parte del contrato de cuidar de ella tan bien como nos sea posible, pero sigo estando segura de que la Tierra no hará nada que genere una catástrofe completa. En el pasado, la Tierra pudo permitirse cambios bastante grandes sin que se ocasionasen daños importantes a la vida sensible porque no estaba tan abundantemente poblada. Pero ahora estamos en un planeta habitado por billones de formas de vida que la Tierra sabe que debemos ser alimentadas y sostenidas.
El concepto de “ciclos” de acontecimientos en la Tierra también se relaciona con la teoría mecanicista según la cual hay ciclos interminables que se repiten a sí mismos. Acepto la idea de ciclos o espirales, pero siento que nos conducen a niveles de experiencia diferentes y superiores. No nos limitamos a seguir retrocediendo una y otra vez alrededor de la misma mancha, por supuesto a no ser que elijamos seguir repitiendo los mismos ciclos una y otra vez. Mi sentimiento, basado en las canalizaciones que he hecho del Arcángel Miguel, es que no sabemos qué se desarrollará en este nuevo ciclo, en ese espacio y tiempo nuevos. Nadie lo sabe. No será como nada anterior y nada de lo pasado nos ha preparado para el lugar al que estamos yendo. Por lo tanto, mirar atrás con temor no es un camino realista para dirigirse hacia el futuro.
Es cierto que estamos viviendo tiempos difíciles y que en esta época hay mucho estrés y caos. Pero la esencia de la Espiritualidad consiste en que aprendamos a vivir en el AHORA; en que nos centremos en el momento presente y lo vivamos con nuestra mejor habilidad, sin expectativas ni demandas. Porque, según la teoría cuántica del tiempo holográfico, los conceptos lineales de “pasado” y “futuro” son irrelevantes. Todo se desarrolla en el “ahora” y todo está en nuestro interior en este preciso instante. Cómo vivamos ahora y las elecciones que ahora hagamos es lo que determinará la evolución de nuestro ser en ese lugar al que llamamos “futuro”.
Sé que cada quien es diferente, pero he encontrado que una de las mejores maneras de estar en el momento del ahora por completo es trabajar en un jardín. Simplemente el estar presente con el sol, el viento y los elementales y espíritus de la naturaleza tiene una energía sanadora y arraigadora. Starchild está trabajando en la creación de un “jardín mágico” para los niños de nuestro proyecto de comedor comunitario. Está circundado a un lado por un camino, con sendos asentamientos a ambos laterales y una clínica pública en el restante. Supone un desafío bastante importante, pero lentamente estamos trayendo de vuelta a los espíritus de la naturaleza. Alguien que vivió en la zona me dijo que antes había allí un río, por lo que puedo imaginarme que ese pedazo de tierra alberga una historia de elementales y hadas a los que podemos atraer de vuelta para los niños cristal de 2007. Hay algo muy mágico en observar el regreso de abejas, pájaros y mariposas a este terreno cuando los alimentamos y cuidamos.
Por último, he notado que, cuando me tiro una carta de la Baraja Angélica, me suele salir la que dice ESPERA UN MILAGRO. Sí, verdaderamente, ¡es nuestra elección! Si anticipamos desastres y acontecimientos negativos, probablemente los crearemos y experimentaremos. Si esperamos un milagro, los cambios y transformaciones que están teniendo lugar pueden producir MILAGROS. ¡No sé ustedes, pero yo estoy alineándome con el lado de los Milagros!
13 de Enero: Hay otro enfoque para la historia de la Inversión Polar. Unas cuantas personas de la comunidad “World of Souls” (Mundo de Almas) sugieren que el cambio polar podría ser un acontecimiento más interno que literal. Bien, tal vez sea un poco ambas cosas.
Ayer estaba sentada en mi escritorio cuando mis Guías me pidieron que tomase el globo del mundo que tengo sobre él y que lo pusiese del revés. “Y ahora, ¿qué ves?” dijeron. Bien, veía la Antártida, el Océano Austral y lo que hay a su alrededor. Fue como mirar un planeta de agua virgen. Sonrieron: “¿Empiezas ahora a entenderlo?”. Oh, sí, empiezo a entender. Los cambios y fluctuaciones magnéticas que estamos experimentando interiormente se relacionan con este cambio del magnetismo planetario. El nuevo sistema de la rejilla cristalina “ha dado la vuelta” al sistema de chakras del planeta. La Antártida ahora es el chakra de la corona. El Océano Austral, territorio de mis amigas las ballenas francas australes, ahora es el Espacio Sagrado de la Nueva Tierra.
Tiene sentido. Me acordé de dos cosas. Primero de que el año pasado, al iniciarse el proceso, se produjo una “anomalía” en el Polo Sur que nadie pudo explicar. Incluso recordé que había visto fotos tomadas por la NASA. Entonces me acordé de una de las canalizaciones que hice del Arcángel Miguel en la que Él hacía alusión a grandes cambios en el Océano Austral que iban a afectar a todo el planeta. Lo que se me dijo fue que la anomalía era el surgimiento del nuevo vórtice magnético que iba a formar el Chakra de la Corona de la Tierra. Se me dijo también que, a pesar de que se produciría cierta inestabilidad magnética en el planeta, este cambio no implicaría grandes desastres. El cambio estaba siendo logrado mediante las modificaciones y transformaciones internas de todos los seres vivos y, de manera especial, las de los trabajadores de la luz, que estaban actuando como “guardianes” de las nuevas rejillas de la Tierra como parte de sus “obligaciones” en la 9ª dimensión. El Arcángel Miguel también ha hablado de esto.
También se me mostró el “anillo” que circunda el planeta a 30 grados de latitud sur, y se me dijo que todos los países que caen dentro de ese anillo formarían parte del nuevo “Chakra del Entrecejo” y serían responsables del “flujo” de energía que descendió del Centro Galáctica a través de la Corona Austral hacia las Rejillas del Planeta. También me acordé de que, en diciembre, recibí un correo de un amigo canadiense muy intuitivo, en el que insistía en que era muy importante que trabajásemos ahora ¡con ballenas y delfines! Entonces no vi la conexión, pero ahora sí. Gracias, Gordon, por la información. Las ballenas y delfines de los Océanos Australes, junto a todas las familias del planeta, están trabajando ahora mismo en sostener y dirigir las nuevas energías que fluyen a través de este chakra nuevo hacia el planeta. Las energías de la Femenina Divina están corriendo desde el Corazón Galáctico a través de este portal, y las ballenas y los delfines son los “sacerdotes y sacerdotisas” que están recibiendo esas energías en sus Templos de Luz Oceánicos. Posteriormente, esa luz es transmitida por las rejillas cristal hasta los países del emergente chakra del entrecejo: Australia, Nueva Zelanda, Tasmania, Chile, Argentina y Sudáfrica.
Bien, mientras la temperatura de la Tierra sigua desequilibrándose, los polos fundiéndose y el clima global volviéndose más cálido, el continente de la Antártida irá emergiendo de su largo sueño como un diáfano continente virgen. Pero a los humanos no se les va a permitir que emigren allá. Nuestros nietos, en cuyo tiempo se producirá todo esto, serán lo suficientemente sabios como para saber que esta tierra es sagrada y que únicamente se les permitirá vivir allá a los que vayan a servir al planeta trabajando junto a las Ballenas y los Delfines en el seno de comunidades espirituales de guardianes y custodios.
Además, se me mostró que las aguas del deshielo no anegarán la Tierra causando destrucción, como se creía anteriormente. La Tierra es un sistema orgánico capaz de regular sus elementos, no limitándose a comportarse mecánicamente como una simple “bañera” que se rebalsa. Sólo muy recientemente se ha sabido que constantemente está entrando agua en el planeta en forma de “bolas de hielo cósmicas” que ingresan en los mares, sin que por ello se produzcan subidas de sus niveles ni inundaciones. La Tierra sabe trabajar con los elementales para asegurarse de permanecer equilibrada. Todo tendrá lugar de acuerdo a la Voluntad Divina, con amor y cuidado.
Por supuesto, nadie ha prestado demasiada atención a estos asombrosos acontecimientos, todos nos hemos quedado fijos en Oriente Medio y en la Guerra de Irak. Como los medios querían que fuese. El aumento de la violencia y el deseo de escalada bélica es una manera de asegurarse de que todo el mundo esté “mirando para otro lado” y nadie vea los cambios y milagros. Mientras se mantenga a la gente en el temor y la incertidumbre, puede hacerse que el avance de su evolución espiritual vaya más despacio, pero no detenerlo. Si más de nosotros despertásemos y viésemos la manipulación de los medios tal y como es, también podríamos ver los milagros que están sucediendo en otros lugares del planeta.
Después de mostrárseme esta información, intenté alinear conscientemente mi chakra de la corona con la Antártida, y me quedé asombrada de lo mucho mejor que me sentí. La energía fluía y tuve sensación de luz y espacio. Creo que lo que nos pasa a diario es que oscilamos entre la 3D y el norte magnético, y la 5D y el “Norte” Espiritual, que ahora está en el Polo Sur. Creo que la Tierra hace lo mismo. Creo que en algún momento de un futuro cercano, tal vez incluso antes de 2012, la Tierra se asentará en los moldes de su nueva Rejilla Espiritual. Y nosotros también lo haremos y, entonces, ¡espero que todos nos sintamos mucho mejor!
Bien, ¡es para pensárselo!
Esta es una bella imagen del cometa McNaught que nos visita. Me gustó esta imagen, extraída de www.spaceweather.com, por la combinación de la imagen del cometa con la del halcón cazando al atardecer. El halcón es un potente símbolo chamánico del poder masculino del Masculino Divino, y me gusta ver en esta imagen una celebración del regreso de la energía Masculina Divina “completa” al planeta.
Sé que en la vieja Tierra existe la tradición de considerar a los cometas como emisarios de tragedias y malas noticias. Yo no. Esto es la Nueva Tierra, un lugar de Amor y de Alegría, y el cometa ha venido como Celebración Celestial. También he leído que el cometa McNaught es el más brillante de los últimos treinta años. Recuerdo que también se dijo de la llamarada solar de diciembre que había sido la más brillante de los últimos treinta años. Por lo tanto, me remonté a hace treinta años: a 1977. Fue entonces cuando llegó la primera oleada de índigos y cuando la tierra comenzó a prepararse para la Ascensión. Entonces, parece que estamos en el umbral de otro cambio importante de nuestra conciencia, en esta ocasión alimentado posiblemente por los niños Cristal asociados a nuestros amigos y aliados los cetáceos y a todos los Trabajadores de la Luz que están sosteniendo la energía del cambio para el planeta.
Y otra cosa a la que prestar atención, nuevamente extraída del sitio en internet de Spaceweather: “En los días venideros, el cometa McNaught enteramente visible irá deslizando su cola por el horizonte, produciéndose su encuentro cercano con Mercurio el 14 de enero. Cuando los cometas se acercan al sol, se volatilizan violentamente. La luz del sol ilumina al gas y el polvo del cometa que se vaporizan, produciéndose un espectáculo muy brillante. El cometa McNaught ya es el más brillante desde el Ikeya-Seki en 1965, y pronto podría llegar a ser visible incluso a plena luz del día. ¡Permanezcan en sintonía!”
Entonces... ¡aquí tenemos al "Cambio de los Polos" y el cometa McNaught... a las ballenas y los delfines... a todos nosotros... y al Amor y el Esplendor cada vez mayores de la Nueva Tierra!
Traducción: Paloma Fernández Fernández. artesyoficios@arnet.com.ar
© 2007-8 text Celia Fenn y Starchild Global
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